“Has cambiado mi lamento en baile; Desataste mi cilicio, y me ceñiste de alegría. Por tanto, a ti cantaré, gloria mía, y no estaré callado. Jehová Dios mío, te alabaré para siempre.”
Salmos 30:11-12 RVR1960
Mostremos la diferencia al mundo sonriendo incluso cuando debemos sentirnos tristes. Cuando danzamos aún sintiéndonos triste dentro de nuestro corazón, esto testifica. Es posible que tengamos que predicar el evangelio simplemente en la alegría del Espíritu Santo. Es en esos momentos de presión, cuando es difícil tener fe y creemos de todos modos ... ¡esos son los tiempos que cuentan! ¡En esos momentos, mostramos al mundo que no tiene nada que ver con nosotros y todo que ver con Él! Dios aparece y cambia las circunstancias. El Señor vendrá por nosotros; El contestará nuestras oraciones. La alegría del Señor es nuestra fortaleza. Él cambiará nuestro dolor en alegría, ¡sólo Dios puede hacer esto!
#TheRockChurches #iamarock